¡Felicitaciones por tu nuevo bebé!
En los primeros días de vida, los bebés siguen patrones singulares de comportamiento a medida que se enfrentan a toda clase de experiencias y sensaciones por primera vez. Pasan la mayor parte del tiempo durmiendo y alimentándose y son extremadamente dependientes de sus padres.
La mayor parte de sus reacciones obedecen a reflejos primarios más que a respuestas intencionadas. Por ejemplo, tocarles el labio o la mejilla probablemente les provoque un reflejo de succión en busca de una fuente de alimento. Proveer de amor y afecto a los bebés durante esta etapa es especialmente importante, ya que les ayudará a sentirse seguros y desarrollar su confianza.
Se recomienda que los niños menores de un año duerman siempre sobre su espalda para reducir la probabilidad del Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL). Por esta razón es esencial que durante el día mientras el bebé este despierto los padres se aseguren de que pase tiempo sobre su estómago bajo su supervisión. Esto le ayudará a fortalecer músculos claves en el alcance de futuros objetivos como sentarse y gatear. Puedes comenzar inmediatamente, ubicando al bebé boca abajo sobre tus piernas o pechos y posteriormente sobre cualquier superficie suave y segura.