Cuando tu niño juega, es fácil ver que está aprendiendo a medida que interactúa con personas, juguetes y entornos. Sin embargo, las investigaciones muestran que los momentos de tranquilidad en silencio tienen grandes beneficios para su cerebro en desarrollo.

La mayoría de los programas de guardería incluyen un “momento en silencio” en sus horarios por esta razón; aún si tu niño pequeño no toma la siesta, puede sacar ventaja de la paz y tranquilidad de sentarse en silencio, abrazando su muñeco de peluche, mirando un libro. ¿Pero exactamente qué significa ese momento en silencio, por qué es necesaria esta pausa para los niños pequeños y qué beneficios tiene?

¿Qué son los momentos en silencio?

Los momentos en silencio pueden definirse de diferentes maneras dependiendo de a quién se le pregunte. En su forma más básica, los momentos en silencio son una parte del día donde tu niño pequeño se toma un descanso de las imágenes, los sonidos y otras actividades estimulantes. Es un momento para guardar los juguetes que hacen ruido o que se iluminan, los equipos para motricidad gruesa/ejercicio (como aros de hula o balones) y aparatos electrónicos. Es probable que tome una siesta durante este tiempo, pero no tiene que hacerlo; también puede jugar en silencio.

Puedes definir un área en casa donde los niños puedan pasar el tiempo en silencio, como una esquina o rincón en la sala o en su habitación, poner música tranquila y relajante o darle un libro para que lo mire y ofrecerle juguetes simples como rompecabezas, bloques y muñecos de peluche.

La cantidad de tiempo que tu niño pase en silencio depende de algunos factores como qué tan cansado parezca o cuánto tiempo puede mantenerse entretenido jugando o leyendo en silencio. Algunos niños se relajan después de una pausa de 15 minutos, mientras que otros pueden necesitar casi dos horas o la misma cantidad de tiempo que durarían tomando una siesta. Deja que tu niño sea tu guía para decidir cuánto tiempo es el adecuado para su descanso. Para algunos niños, las pausas más cortas pero más frecuentes pueden funcionar mejor que las pausas largas.

¿Por qué son necesarios los momento en silencio?

Los momentos en silencio son fundamentales para todos los niños pequeños, bien sea si todavía toman siestas o no. Este periodo de descanso calma la mente y el cuerpo, dándole a tu pequeño una oportunidad de alejarse de las estimulaciones constantes. Los momentos en silencio ofrecen:

Relajación. La infancia está llena de momentos de sobrecargas sensoriales. En esta edad, tu niño absorbe todo lo que ve, oye, prueba, huele y toca, y su cerebro funciona en sobrecarga para poder darle sentido a todo. Los colapsos sensoriales que simulan pataletas son comunes a esta edad, especialmente cuando los niños no tienen tiempo para alejarse, relajarse y recargarse antes de que sucedan.

Juego solitario, dedicado. Cuando los niños pequeños tienen tiempo para ellos mismos, aprenden sobre lo que les gusta y se dedican a una actividad con todo su esfuerzo. No hay distracciones u otras personas por las cuales preocuparse.

Imaginación. Los momentos en silencio ofrecen una pausa para el pensamiento creativo. Una vez más, si hay menos distracciones hay más posibilidades para reflexionar sobre el día, enfocarse en un libro o participar en juegos de rol.

Concentración. En un área silenciosa sin mucha o con nada de distracción, tu niño puede concentrarse solamente en lo que está haciendo. Podrías notar que es durante los momentos en silencio que tu niño se mueve menos y tiene la capacidad de sentarse y mirar un libro entero, a solas.

Absorción. Los niños pequeños aprenden mucho todos los días. Darle al tuyo descansos en silencio, así sea por unos cuantos minutos, le da tiempo para absorber todo lo que ha aprendido, en pequeñas fracciones.

Autosatisfacción. Las investigaciones muestran que los niños y adolescentes que pasan tiempo solos con regularidad, tienen una percepción más positiva de estar a solas. Es durante el tiempo a solas que controlan sus sentimientos, reflexionan sobre sus pensamientos y acciones, calman su ansiedad y hacen labores productivas. Crear un horario consistente para los momentos en silencio de tu niño, puede potencialmente ayudarle a usar sus momentos a solas sabiamente a medida que va creciendo y a sentirse satisfecho estando solo.

¡Los momentos en silencio también son beneficiosos para los padres y cuidadores! Tú también necesitas descansos durante el día para relajarte y reflexionar, así que darle a tu niño unos minutos de calma puede mejorar tu estado de ánimo y productividad.

¿Qué pasa si mi niño pequeño odia estar solo?

Si tu niño te persigue por toda la casa y llora cada vez que se da cuenta de que no estás a la vista, es posible que te preguntes cómo podría funcionar esto de los momentos en silencio. Si este eres tú, dirígete a nuestro artículo sobre ayudar a los niños pequeños a disfrutar solos de los momentos en silencio, donde puedes encontrar consejos, paso a paso, para facilitarle a tu pequeño a sentirse cómodo estando solo.

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